Abro los ojos.Me mantengo atenta, observando cada detalle de lo que me rodea y ahí, te veo.Cierro los ojos. Esperando que desaparezcas en ese instante, pero no quiero perderte de vista, no todavía. No quiero porque te quiero. Así que miro, recorro cada pelo de tu pelo, cada gesto de tus gestos.
Te veo y pienso, después de todo lo que hemos roto y tan lejos de donde hemos estado, ahí estas, cerca pero lejos.No necesito que digas nada. Dices con tu mirada más de lo que crees, pero preferiría que me gritaras con odio, el dolor pesa tanto como el orgullo. Miro a otro lado, después te vuelvo a mirar tratando de decir las cosas que no puedo borrar, todo mi cuerpo quiere verte y pide a gritos abrazarte.Pero no quiero hablar de eso no quiero conversación, solo quiero sentarme y mirarte, prefiero mil veces tu sonrisa que cualquier palabra.Horas, días mirándote, disimuladamente y tan solo minutos para que te evapores. Te sigo con la mirada hasta perderte. Una vez mas, otra vez, lo que creía permanente demostró que es solo fugitivo. Una y otra vez, lo que imagine repetible, no tuvo lugar nunca más en ese día.Me ciego por completo, sintiendo el vacío y escuchando a mi corazón que es el único que late y tu imagen repetida en mi cabeza caminando sobre la línea que divide algún lugar en mi mente.
Siempre tuve ganas de decirte un millón de cosas, pero ahora tengo que dar un paso adelante y ser fuerte, aunque se que nos juntaremos algún día, no vos ni yo, sino tus ojos y los míos y entrecerrados, casi dormidos, disfruten echando de menos esos momentos en los que me hiciste tan feliz.
Thanks Caroline :)
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